Trastorno Disociativo de Identidad

Trastorno Disociativo de Identidad: Cambios en la expresión facial que pueden reflejar distintos estados de identidad o personalidades.

“Trastorno Disociativo de Identidad” es una obra que busca capturar la complejidad de vivir con múltiples identidades coexistiendo en un solo ser. La variedad de colores y piezas representan las distintas personalidades que pueden estar presentes, a menudo ocultas a la vista de los demás. La mirada directa desafía al espectador a reconocer la profundidad y la realidad de esta experiencia, mientras que la composición fragmentada invita a reflexionar sobre la naturaleza fragmentada de la identidad.

Año
2023
Impresión
Pigmentos Fine Art
Papel
Fuji Crystal Archive DP II
Acabado
Brillo
Dimensiones
100 cm x 100 cm
Formato
Cuadrado
Piezas
Una pieza
Montaje
Metacrilato + Copia fotográfica + Aluminio DIbond de 3 mm
Soporte
Metacrilato 4 mm
Sujeción
Rieles de aluminio
Marco
Si
Tipo de marco
Slimline
Empaquetado
En caja de cartón reforzada

Trastorno Disociativo de Identidad

El Trastorno Disociativo de Identidad (TDI), anteriormente conocido como Trastorno de Personalidad Múltiple, es un trastorno mental complejo caracterizado por la presencia de dos o más personalidades distintas dentro de un individuo. Estas personalidades, a menudo denominadas “alter egos” o “alters”, pueden tener sus propios nombres, edades, historias, y maneras de interactuar con el mundo.

Las causas exactas del TDI no se comprenden completamente, pero se asocia con traumas severos durante la infancia, como abuso físico o emocional prolongado. Se cree que la disociación es un mecanismo de defensa que el cerebro utiliza para protegerse de las emociones y recuerdos abrumadores asociados con estos traumas.

Los síntomas del TDI pueden variar ampliamente, pero incluyen lapsos de amnesia, cambios en el comportamiento, depersonalización, desrealización y relaciones alteradas con el entorno. Los individuos con TDI pueden sentir que pierden tiempo o experimentan lapsos en los que no pueden recordar actividades, comportamientos o información personal.

El diagnóstico del TDI es complejo y debe ser realizado por un profesional de la salud mental utilizando criterios diagnósticos específicos, como los del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5). El tratamiento del TDI generalmente implica una combinación de psicoterapia, medicación para síntomas concomitantes y técnicas de apoyo. El objetivo del tratamiento es integrar las diferentes personalidades en una y mejorar el funcionamiento del individuo.

Es importante destacar que el TDI es un trastorno legítimo y reconocido, aunque a menudo mal entendido y rodeado de estigma. La representación sensacionalista en los medios de comunicación ha contribuido a malentendidos comunes y estereotipos sobre este trastorno.