Trastorno Bipolar

Trastorno Bipolar: Durante episodios depresivos o maníacos, puede haber una expresividad facial aumentada o disminuida.

En esta pieza, he intentado capturar la dualidad y el contraste de emociones que caracterizan este trastorno. La paleta de colores, con sus agudos contrastes entre la luminosidad y la oscuridad, refleja los altibajos emocionales. Los fragmentos rotos y desordenados simbolizan la desintegración y la reconstrucción constante del yo, una lucha entre la desolación y la euforia. La mirada de la figura, directa pero enigmática, busca transmitir esa lucha interna, el deseo de cohesión en medio de la discontinuidad emocional.

Mosaico de Emociones Ocultas: Arte que explora la psique humana

Trastorno Bipolar

El trastorno bipolar, anteriormente conocido como psicosis maníaco-depresiva, es una enfermedad mental que se caracteriza por cambios significativos en el estado de ánimo y la energía, que van desde episodios de euforia o irritabilidad extrema (conocidos como manía) hasta episodios de tristeza y desesperanza (depresión). Estos no son los altibajos normales que experimentan las personas; los cambios de humor en el trastorno bipolar son más intensos, pueden afectar la capacidad de funcionamiento de la persona y, en algunos casos, pueden incluir síntomas psicóticos.

Hay varios tipos de trastorno bipolar, incluyendo el Bipolar I, Bipolar II y el trastorno ciclotímico, que difieren en la duración e intensidad de los episodios maníacos y depresivos. Las personas con Bipolar I experimentan episodios maníacos completos, mientras que las que tienen Bipolar II sufren episodios hipomaníacos, que son menos intensos. El trastorno ciclotímico se caracteriza por fluctuaciones más leves del estado de ánimo que persisten durante un período prolongado.

Las causas del trastorno bipolar son multifactoriales, implicando una combinación de genética, estructura cerebral y química, así como factores ambientales. El diagnóstico se realiza habitualmente mediante la evaluación clínica por parte de un profesional de la salud mental basada en la historia de los síntomas y su impacto en la vida cotidiana del individuo.

El tratamiento suele ser una combinación de medicación, como estabilizadores del ánimo, antipsicóticos y antidepresivos, y terapia psicológica, que puede incluir terapia cognitivo-conductual y apoyo para el desarrollo de estrategias de manejo del estrés y la regulación emocional. La educación y el apoyo continuo también son vitales para el manejo a largo plazo del trastorno. Con un tratamiento adecuado, muchas personas con trastorno bipolar pueden llevar vidas plenas y productivas.